jueves, noviembre 02, 2006

LA LITERATURA ECUATORIANA Y LA FERIA DEL LIBRO DE BOGOTA


LA LITERATURA ECUATORIANA Y LA FERIA DEL LIBRO DE BOGOTA



Muy buenos dias , le habla JULIO MARIO CASTRO RIVERA , para presentarles el programa GRITOS Y PALABRAS.
Nos sintonizan en la pagina de Internet http://www.lavozdelcinaruco.com/ a las 7:30 am todos los domingos.
Hoy dedicamos este momento cultural a LA LITERATURA ECUATORIANA
Podemos considerar que la literatura ecuatoriana se inicia en el ámbito prehispánico con la cultura de la civilización incaica, cuyos dominios alcanzaron el actual territorio de Ecuador (véase Reino de Quito). Durante la colonia surgieron los primeros poetas dignos de mención: en el siglo XVII destacó Jacinto de Evia (1629-?) y en el XVIII Juan Bautista Aguirre (1725-1786). En esa misma época sobresalen el narrador y político Francisco Eugenio de Santa Cruz y Espejo, buen representante de las inquietudes renovadoras que mostraban los intelectuales en la segunda mitad del siglo XVIII, como demuestran los diálogos que tituló Nuevo Luciano o despertador de ingenios (1779), y Juan de Velasco (1727-1792) con su Historia del Reino de Quito (1789).

2 EL SIGLO XIX
En el primer tercio del siglo, marcado por las luchas por la independencia y la influencia de la Ilustración, hay que mencionar al poeta neoclásico José Joaquín Olmedo con La victoria de Junín. Canto a Bolívar (1825) y Oda al general Flores, vencedor de Miñarica (1835). En el ensayo destacaría después Juan Montalvo, notable prosista, clásico y casticista, y figura relevante del catolicismo liberal y democrático, con títulos como Siete tratados (1882), Las catilinarias (1882) o Geometría moral (1917). El romanticismo contó también con la poesía de Numa Pompilio Llona (1832-1907) o de Julio Zaldumbide (1833-1887) y, sobre todo, con la novela Cumandá o un drama entre salvajes (1879), con la que Juan León Mera ofreció una muestra destacada de literatura indigenista. La influencia del parnasianismo se dejó ver en poetas como César Borja (1852-1910) y Remigio Crespo Toral (1860-1939).

3 EL SIGLO XX
Con A la costa (1904) y otras novelas de fuerte contenido social, Luis A. Martínez (1869-1909) realizó el primer análisis realista de la sociedad ecuatoriana, pero sólo al final de la década de 1920 la narrativa ofreció una verdadera riqueza. Otros representantes de la narrativa realista fueron Eduardo Mera (1871-1913) y Manuel J. Calle (1866-1918). De 1927 data la primera novela indigenista ecuatoriana, Plata y bronce, de Fernando Chaves (1902- ). Pablo Palacio fue el mejor representante de la orientación vanguardista, pronto desplazada por el crudo realismo de los escritores de la década de 1930. En esta época sobresalió el grupo de Guayaquil, integrado por Demetrio Aguilera Malta, José de la Cuadra, Alfredo Pareja Diezcanseco (1908- ), Joaquín Gallegos Lara (1911-1944) y Enrique Gil Gilbert (1912-1973), a los que después se unió Adalberto Ortiz (1914- ). También en la Sierra aparecieron novelistas, entre los que destacó Jorge Icaza con su alegato indigenista y su indagación en la identidad nacional. Ninguna promoción posterior alcanzó relieve semejante, aunque la narrativa ecuatoriana se ha ido enriqueciendo con las aportaciones sucesivas de escritores notables, como Pedro Jorge Vera (1914-1999), Alfonso Barrera Valverde (1925- ), Miguel Donoso Pareja (1941- ), Iván Egüez (1944- ), Abdón Ubidia (1944- ) y Eliecer Cárdenas (1950- ), entre otros.

Con la obra de Arturo Borja (1892-1912), Medardo Ángel Silva y otros poetas, el modernismo se afianzó tardíamente en el país. Después llegaron las manifestaciones casi siempre moderadas de las vanguardias, representadas sobre todo por Hugo Mayo (1898-1988), Jorge Carrera Andrade y Gonzalo Escudero (1903-1971), hasta que los integrantes del grupo Madrugada (1944), como César Dávila Andrade (1918-1967) y Jorge Enrique Adoum, conjugaron las preocupaciones sociales con la exaltación de la tierra americana, antes de buscar otras soluciones para expresar sus inquietudes existenciales más íntimas. Los poetas posteriores prefirieron esta última opción, que ofreció numerosos matices en las creaciones de Efraín Jara (1926- ), Jacinto Cordero (1929- ), Francisco Granizo (1928- ) y Euler Granda (1935- ). Con Ileana Espinel (1933- ) y Fernando Cazón (1935- ) la poesía se enriqueció de escepticismo, mientras las preocupaciones sociopolíticas impulsadas por la Revolución Cubana determinaban en buena medida la obra de los Tzántzicos, como Ulises Estrella (1939- ) y Raúl Arias (1944- ), entre otros. Rubén Astudillo (1938- ), Ana María Iza (1941- ), Bruno Sáenz (1944- ), Iván Carvajal (1948- ) y Sara Vanegas (1950- ) son también poetas notables.
Gonzalo Zaldumbide (1884-1965) y Benjamín Carrión han sido ensayistas destacados. Demetrio Aguilera Malta, Francisco Tobar García (1928- ) y José Martínez Queirolo (1931- ) sobresalen entre los dramaturgos.

Jorge Carrera Andrade (1903-1978), poeta y diplomático ecuatoriano. Nació en Quito y se le considera el más grande escritor ecuatoriano y uno de los importantes poetas en lengua española del siglo XX. Desempeñó cargos diplomáticos en Europa, América del Sur y Japón, y trabajó en el ministerio de Relaciones Exteriores. Sus viajes supusieron una influencia en su poesía, rica en nombres de lugares y descripciones. Aunque algunos de sus poemas reflejan su identificación con la revolución social, la mayor parte de su poesía consiste en descripciones metafóricas de lugares y objetos, y se caracteriza por sus imágenes sensibles y originales. Entre las obras de Carrera se cuentan El estanque inefable (1922), La guirnalda del silencio (1926), La hora de las ventanas iluminadas (1937) y Floresta de los guacamayos (1964). Escribió también libros de viajes, como Rostros y climas (1948), y ensayos como La tierra siempre verde (1955). Véase Literatura ecuatoriana.
Benjamín Carrión (1897-1979), escritor y político ecuatoriano. Nació en Loja. Tomó parte en la fundación del Partido Socialista de Ecuador en 1925. Se preocupó toda su vida por los problemas sociales y culturales de su país y del resto de Latinoamérica. En esa línea se encuadran sus principales escritos, Atahualpa (1934), biografía del desdichado emperador inca, y sus Cartas al Ecuador (1943). Fundó en 1944 la Casa de la Cultura Ecuatoriana, destinada a convertirse en una de las principales instituciones culturales de su país, y desde la que Carrión ejerció su mecenazgo sobre sucesivas generaciones de artistas, escritores e intelectuales ecuatorianos.
Destacado representante de la literatura ecuatoriana, ministro de Educación y embajador en México y en Colombia, sus contribuciones culturales le valieron en su edad madura el reconocimiento de todo el continente, recibiendo en 1968 el Premio Benito Juárez del gobierno mexicano, y en 1975 el Premio Eugenio Espejo, el más prestigioso de los que se conceden en Ecuador a las personalidades del mundo de la cultura. Falleció en 1979, en Quito.
Medardo Ángel Silva (1898-1919), poeta ecuatoriano, en su breve existencia tuvo tiempo de constituirse en el más destacado exponente del modernismo en su país.
Nacido en Guayaquil, formó parte de la llamada "generación decapitada" debido a que sus principales miembros murieron jóvenes. Silva, en la más genuina tradición del romanticismo, se suicidó. Junto a él figuran, en la citada tendencia, Ernesto Noboa y Caamaño, Arturo Borja y Humberto Fierro. Algunos de sus poemas han sido llevados a la música en forma de canciones. La temática de Silva es la habitual del decadentismo: el hastío de la existencia, el pesimismo histórico y moral, el sinsentido de la existencia que busca en el arte un consuelo inalcanzable, el ideal de un lenguaje armonioso y musical. Su breve obra comprende el poemario El árbol del bien y del mal (1918) y la novela por entregas María Jesús (1919).


LA FERIA DEL LIBRO EN BOGOTA

Los más pequeños, los más pesados, los más antiguos; estos son los libros más raros de la Feria
Desde un ‘Kamasutracito’ hasta la primera edición de ‘La hojarasca’, de 1955, se pueden encontrar entre las curiosidades.
Los más pesados
No se trata de ladrillos en cuanto a lectura se dice, literalmente son las obras de mayor peso.
Los 7 kilos que tiene cada uno, los hacen ver como los luchadores de sumo de los libros de mesa.
Los especialistas los denominan XXL (Libros de gran formato). Entre ellos están: ‘The Complete Costume History’, por $890.000; ‘El atlas Maior’, con mapas de 1665, $790.000; y ‘Jazz Life’, un viaje por este género musical en los E.U. de los años 60. Fotos de William Claxton y textos de Joachim E. Berendt, $790.000.
Se encuentran en el pabellón 3, ‘stand’ de la editorial Taschen.
El más duro para la billetera
'Enciclopedia Ilustrada Universal’ Espasa-Calpe. Por 34 millones 900 mil pesos, según su editores, “se adquieren todos los conocimientos del hombre”.
Está conformada por 72 volúmenes, 10 apéndices y 8 complementos, que dan un total de 90 tomos.
En la Feria tiene un descuento del 40 por ciento y si la compra no se preocupe, el transporte lo ponen ellos. Pabellón 6, primer piso, ‘stand’ de Planeta.
El más de colección
García Márquez no podía faltar en esta selección. Del Nobel se puede encontrar un ejemplar de la primera edición (como ‘edición príncipe’ la conocen libreros y coleccionistas) de ‘La hojarasca’, en Colombia.
Editada por SLB, la obra se “terminó de imprimir el 28 de mayo de 1955”. Según los catálogos internacionales, esta obra está avaluada en 6.000 dólares. ¿Quién da más?
Pabellón 6, ‘stand’ 232.
Los más pequeños
'Te amo’ se llama esta colección de tres libros, cada uno de 1x0.7 cms., que contienen 40 poemas de amor, hechos en Lima (Perú).
Los vendedores no hablaron de lupa adicional pero sería una buena opción para poder leerlos.
Por $10.000 puede llevar los tres y le enciman el estante para que no se le pierdan en su biblioteca.
El más práctico para la práctica
Este ‘Kamasutracito’ cabe en una mano (mide 6.5x5.3 cms.) y puede sacarlo de una crisis de creatividad.
No está de más decir que tiene pasta dura e ilustraciones para hacer fácil la lectura. $10.000.
Pabellón 3, ‘stand’ 145.
Los más antiguos
'Lava CRVM’, un breviario sobre teología, editado en Venecia (Italia), en 1539 y ‘La tercera y cuarta partida’ (tomo de la colección ‘Las siete partidas’) de Alfonso X-El sabio, una obra de 1587, pueden ser considerados los más viejitos en esta versión de la Feria.
Pabellón 6, ‘stand’ 232.
El título más raro
Por cinco mil pesos puede encontrarse esta recopilación de relatos lúdicos del mexicano Alfredo Elías Calles.
Editado por Plaza y Janés ‘La familia nalga’ ha vendido en lo que va de feria 30 ejemplares. “Este libro está dirigido a gente inteligente y carente de complejos”, se lee en la contratapa. “Algunos lo ven, lo ojean y no lo llevan, terminan diciendo: ‘mejor espero la película’”, contó la vendedora.
Pabellón 3, Producciones Triple eee, ‘stand’ 445.El más de película
The Stanley Kubrick Archives’, editado por Alison Castle y de tiraje limitado, trae fotos, filmografía y biografía del cineasta estadounidense. Además, por la compra dan de ñapa un pedazo (12 fotogramas) de la cinta original de ‘2001: Odisea del espacio’. Incluye también un CD con una entrevista a Kubrick en 1966.
Pabellón 3, ‘stand’ de Taschen.
El más 'todoterreno'
'El todoterreno’, como su nombre lo indica, además de leerse sirve como rompecabezas y pista de carros. Le puede sacar el resorte que une las páginas, estas son las fichas del rompecabezas, lo arma y queda convertido en una pista de un carro. $45.000
Pabellón 8, ‘stand’ 318.
El más delgado de páginas
Nunca la expresión “se lo lee de un soplo” cobró más certeza, pues cada uno de los ocho libros que conforman ‘La Colección Ratatán’ no pasan de las 10 páginas. Son pequeñas historias ilustradas, de editorial Norma. $8.700.
Pabellón 8, Norma.
Desafortunadamente el tiempo se nos ha acabado para seguir hablando LA LITERATURA ECUATORIANA.
Si quieres proponer un tema cultural escribanos al correo electrónico juliomario@telecom.com.co
Oyentes de la voz del cinaruco, los espero el proximo domingo en sintonia del programa GRITOS Y PALABRAS a las 7 y media de la mañana. Le habló Julio Mario Castro Rivera.

Feliz dia para todos.

No hay comentarios.: